sábado, 6 de abril de 2013

Así



El piso guarda todo lo que nos sobra.
Dos copas, de las cuales una está llena.
Una botella. Vacía. Como yo.
Sábanas blancas. Frías. Como vos.
Hay un cigarrillo sin terminar.
Como esta historia.

Afuera no pasan autos.
Gente como luciérganas.
Los pienso como te pensé a vos.
Inalcanzables.
Transparentes.
Pienso que entre ellos está él.
Quiero sentirlo.
Pero estás vos.
Y te siento.

El piso sigue sosteniendo este invento.
Esta locura de vernos desesperadamente, 
para acabar desesperadamente...
Ese instante de mentir que nos queremos.
Ese instante de querer mentirnos.
De decir que no existimos, que no somos.
Pero sin embargo, ahí estamos.
Luego todo se vuelve irreal.
Si si, ahi estamos.
Con dos copas, con humo, sin ropa, 
Sabiendo que no existe el afuera.
Mintiendonos sin querer.
Queriendonos sin mentir.